Barcelona y la sostenibilidad: un compromiso real 02/06/2022
Hace ya algunos años que nos hemos concienciado de que la sostenibilidad no es una opción, sino una necesidad. Estamos cambiando nuestra forma de consumir, de comer, incluso de viajar porque el planeta no puede esperar. Y cada pequeño gesto, cada paso cuenta. ¡Descubre el lado sostenible de Barcelona!
Barcelona: una ciudad pionera en sostenibilidad
Queremos que disfrutes de la experiencia de visitar Barcelona al máximo. Y por suerte, este propósito no está reñido con la sostenibilidad. ¿Sabías que Turisme de Barcelona está adherida a la Declaración de Glasgow? Eso quiere decir que nos hemos comprometido a cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fijados por las Naciones Unidas. No en vano Barcelona fue la primera ciudad Biosphere del mundo (es decir, que vela por la sostenibilidad en el ámbito turístico), y cuenta con más de 300 empresas que velan por un modelo de turismo responsable. Elegir de una forma más consciente te será muy fácil!
Movilidad accesible y eficiente
Muévete por Barcelona y apuesta por el planeta utilizando la extensa red de transporte público de Barcelona, que garantiza la máxima eficiencia energética. Es accesible, ecológica, rápida y cómoda, con una flota de autobuses totalmente adaptada y de las más limpias de Europa. Además, el 93% de las estaciones de metro cuenta con ascensores.
En constante transformación
Barcelona es tan dinámica que no deja de transformarse y de buscar soluciones a los retos de sostenibilidad a los que nos enfrentamos actualmente, y la ciudad pone a las personas y al medio ambiente en el centro. Las superilles (supermanzanas), por ejemplo, están convirtiendo las calles de Barcelona en espacios más humanos, recuperando las zonas ocupadas por los vehículos en favor de los peatones y devolviendo la naturaleza a las zonas asfaltadas.
Otra mejora medioambiental son los jardines verticales que trepan por las paredes de la ciudad, contribuyendo a que sea más sostenible. Y a mediados de abril de 2023, Barcelona contará con el primer bosque vertical con 15 árboles en suspensión en la entrada del centro cultural Caixaforum.
Des-pa-ci-to: Barcelona a ritmo slow
Barcelona es una ciudad ideal para recorrer a pie; puedes hacerlo a tu aire o siguiendo una de las rutas guiadas que te descubrirán las anécdotas más interesantes y sus rincones escondidos. El urbanismo de Barcelona invita a caminar por los 10 distritos de la ciudad. Cada barrio tiene su encanto y su pulso, y en todos ellos encontrarás patrimonio arquitectónico desconocido, mercados de producto fresco que regalan los sentidos o parques diseñados para relajarte en plena naturaleza. Por cierto, si miras al cielo, puede que veas un halcón peregrino. Sí, sí, has leído bien. Fueron reintroducidos en la ciudad y en 2005 anidó la primera pareja nada más y nada menos que en una de las torres de la Sagrada Familia.
Otra de las grandes protagonistas de la ciudad es la bicicleta. Miles de personas la utilizan cada día para llegar a sus destinos a través de los 240 kilómetros de carril bici. Anímate a descubrir Barcelona con alguna de las rutas guiadas en bicicleta. Y si lo prefieres, puedes recorrer los grandes espacios naturales de Barcelona y sus alrededores a lo largo de la Ronda Verda, un circuito circular de caminos y carriles bici de uso lúdico con un total de 72 km, con posibilidad de hacerlo por tramos.
Una apuesta por el slowfood y la alimentación saludable
A los 39 mercados alimentarios que hay repartidos por la ciudad llegan cada día toneladas de producto fresco, clave en la dieta mediterránea (declarada Patrimonio Intangible Cultural de la Humanidad por la UNESCO). Y Barcelona, mediterránea por excelencia, tiene en su estilo de cocina catalana una deliciosa mezcla de patrimonio gastronómico, tradición, producto, territorio, creatividad e innovación. Podrás degustar los platos más típicos pero también las propuestas más vanguardistas en los variados restaurantes de la ciudad.
Por cierto, uno de los alimentos más valorados que encontrarás en los mercados es el pescado. Y te gustará saber que parte proviene de las mismas costas de la ciudad, ya que Barcelona… ¡tiene pescadores! En concreto, existen actualmente 23 embarcaciones que dan trabajo a más de 200 personas. Están en el barrio de la Barceloneta, y podrás descubrir su historia visitando la Cofradía de Pescadores de la Barceloneta, donde un grupo de biólogos marinos te hablará de sus orígenes y del tipo de pesca de esta comunidad tan arraigada a la historia del litoral de la ciudad. Además, podrás visitar la lonja en la que se subasta el pescado recién traído del mar.
Dentro de la tendencia del realfooding (consumir alimentos frescos y mínimamente procesados), el slowcooking propone volver a un estilo de vida más saludable disfrutando de la comida como antes. Practícalo a conciencia cocinando alguno de estos 17 platos tradicionales que reflejan la riqueza del paisaje del entorno barcelonés: mar, montaña, bosque y huerta. ¿Cocinar no es lo tuyo? Participa en alguno de estos cursos y talleres de cocina: aprenderás, te divertirás… ¡y te chuparás los dedos!
Los espacios y pulmones verdes de la ciudad
El pulmón verde por excelencia de Barcelona es la icónica montaña de Montjuïc, y cuenta con un montón de sorpresas y propuestas. Descubre su vegetación, variada y llena de especies botánicas interesantísimas (algunas procedentes incluso de Australia) con la Ruta Botánica autoguiada. Entre árboles gigantes, plantas exóticas y flores de colores, en la montaña de Montjuïc encontrarás diferentes espacios culturales que merecen una visita: el Museu Nacional d'Art de Catalunya, el Pabellón Mies van de Rohe, el Caixaforum, el Museu Olímpic i de l'Esport o la Fundació Joan Miró. Y al ser uno de los puntos más altos de la ciudad, las mejores vistas de Barcelona y del mar están aseguradas: súbete al Telefèric de Montjuïc (totalmente adaptado para silla de ruedas) y descubre el Castillo que corona la montaña.
Otro de los grandes espacios verdes de Barcelona es la sierra de Collserola. Este espacio verde es un oasis en la ciudad y cuenta con muchas opciones de senderismo. La ruta guiada "El bosque secreto" propone un itinerario con vistas espectaculares sobre la ciudad. Y para rematar la experiencia, degustarás una comida típica catalana en una masía del s.XVI.
Barcelona cuenta también con dos espacios naturales recuperados y protegidos a ambos lados de la ciudad. El Espacio Natural del Delta del Llobregat es un lugar ideal para disfrutar del paisaje y descubrir el medio natural, ya que incluye un universo de fauna y flora de gran riqueza. Y el parque fluvial del Besòs ha sido testigo de un gran proceso de recuperación y dispone de una amplia zona de uso público para pasear o ir en bicicleta.
Las playas, un tesoro a preservar
Barcelona cuenta con 5km de playas; un tesoro que la ciudadanía aprecia y cuida día a día. Las playas de Bogatell, Mar Bella, Nova Mar Bella y Sant Sebastià cuentan con el sello Bandera Azul, que reconoce el buen estado del agua, el alto nivel de servicios y la seguridad ofrecida a los bañistas. Y todas ellas disponen del certificado ISO como garantía de mejora continua y prevención de la contaminación. Además, son accesibles a las personas con movilidad reducida y cuentan con un servicio de asistencia al baño durante el verano. Podrás acceder a las playas desde cualquier punto de la ciudad mediante transporte público o en bicicleta.
El Mediterráneo te brinda muchas opciones para conectar contigo y a la vez con el mar. ¿Qué tal relajarte haciendo yoga sobre una tabla de paddle surf? ¿Y deslizarse sobre las azules aguas del mar en kayak o en una tabla de paddle surf a ritmo pausado con vistas al puerto y a la ciudad? Suena bien, ¿verdad?
Ir de tiendas y disfrutar localmente
En un mundo globalizado, el consumo local es un ejercicio de responsabilidad. En Barcelona encontrarás un gran escaparate al aire libre con tiendas emblemáticas y comercios centenarios que ofrecen producto local, artesanía, diseño con identidad propia y moda sostenible.
Y la autenticidad de las fiestas y tradiciones de la ciudad está viva todo el año, preservando una gran riqueza sociocultural.
Como ves, se puede visitar Barcelona de forma sostenible, amigable con el planeta y socialmente responsable. Disfrútala sabiendo que cada elección cuenta.